Rentabilidad

VALORACIÓN ECONÓMICA Y RENTABILIDAD

El cambio de una instalación de alumbrado existente por una energéticamente más eficiente (sistemas de control, lámparas más eficientes, etc.) supondrá una inversión inicial pero, en un futuro, los costes de operación y mantenimiento se verán reducidos. La pregunta es si los ahorros futuros justifican el gasto inicial.
Para evaluar el coste de una instalación de iluminación no se debe tener en cuenta únicamente el coste inicial, sino también los costes de explotación previstos, ya que el coste de la energía eléctrica facturada es muy importante en el coste global de la instalación.

Por tanto, para realizar un análisis de costes se requieren los siguientes datos:
•  Número y tipo luminarias necesarias.
•  Precio de la luminaria.
•  Número y tipo de lámparas necesarias.
•  Precio de la lámpara.
•  Consumo por luminaria/proyector, incluyendo las pérdidas de los equipos.
•  Tarifas de energía eléctrica.
•  Vida útil de la lámpara.
•  Horas de funcionamiento anual de la instalación.
•  Financiación y amortización.

Como ejemplo se considera el supuesto de sustitución de una lámpara incandescente de 60 W por una fluorescente compacta (LFC) de 11 W que ofrece la misma cantidad de luz, estimando que se mantiene encendida 1.000 horas anuales.

Teniendo en cuenta lo anterior el ahorro anual considerando únicamente los costes de energía eléctrica es de 4,25 €/año. Si se tiene en cuenta la vida útil de las lámparas fluorescentes compactas (6.000 horas), el ahorro en energía eléctrica es de 25,5 €; si se considera el coste de las lámparas, en dicho periodo habría que adquirir seis incandescentes frente a una LFC, por lo que el ahorro total sería de 20,38 €.

La iluminación representa un porcentaje importante del consumo eléctrico tanto en el sector residencial como en el terciario, contribuyendo, por tanto a la emisión de gases de efecto invernadero.

Continuando con el ejemplo anterior, la sustitución de una bombilla incandescente de 60 W por una lámpara fluorescente compacta de 11 W supone que se dejan de emitir 20,6 kg CO2 al año. Esto significa que si todas las familias de la Comunidad de Madrid cambiaran una bombilla incandescente de 60 W por su equivalente de bajo consumo, se evitaría la emisión de 590 toneladas de CO2, equivalente al CO2  generado por un coche si diese 88.000 vueltas al mundo.